Una cámara fotográfica es un equipo delicado, compuesto por lentes y objetivos que continuamente se exponen a partículas de polvo, manchas, arañazos o suciedad. Por ello es muy importante mantener la cámara fotográfica limpia y bien cuidada, para conservarla al máximo en el tiempo y para evitar que las fotografías no se capten correctamente.
- Es mejor guardar siempre la cámara en su propia funda o estuche
- No exponer la cámara al agua (excepto si es acuática) o a temperaturas extremas
- Es preferible no tocar directamente las lentes, para evitar huellas o arañazos
- Utilizar para su limpieza, elementos como cepillos, trapos o bastoncillos especiales
- Cuidar la cámara durante su transporte (portándola, en fotografías para exteriores, viajes, etc)
- No golpear la cámara para evitar roturas o daños internos
- Intentar mantener siempre una limpieza periódica de las lentes y los objetivos
No obstante, ante cualquier duda respecto al mantenimiento o cuidado de una cámara fotográfica, se puede consultar el propio manual de la misma o preguntar en una tienda especializada. Así mismo, en un curso de introducción a la fotografía nos guiarán sobre sus mejores cuidados.